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¿Qué es revegetar marihuana?

F1 Fast Version® revegetando en exterior.
F1 Fast Version® revegetando en exterior.

En el artículo que vas a leer encontrarás todo lo necesario para poder revegetar marihuana exitosamente y recuperar esa planta de la que te has enamorado y no matarla en el intento.

La revegetación de marihuana es una técnica muy valiosa que requiere poco esfuerzo y de la que es fácil salir airoso, dándote la oportunidad de rescatar esa planta que tanto te ha llamado la atención en el cultivo, pero de la que no habías guardado esquejes. O tal vez te hayas quedado sin poder comprar semillas de marihuana, pero quieres cultivar de nuevo.

Desde Sweet Seeds®, exploramos en profundidad el proceso de revegetar marihuana, desde su definición hasta los pasos detallados para llevarlo a cabo con éxito. Descubriremos cómo esta técnica puede ahorrar tiempo y recursos, permitiendo una producción continua y la conservación de genéticas valiosas.

Además, proporcionaremos consejos prácticos para cuidar tus plantas durante la revegetación y resolver problemas comunes que puedan surgir

Al final de este artículo, tendrás una comprensión clara de los beneficios de la revegetación y estarás equipado con el conocimiento necesario para implementarla en tu propio jardín, seas un cultivador nivel pro o estés en los inicios. ¡Vamos a crear nuestro Frankenstein!

¿Qué es la revegetación de marihuana?

Técnicamente, cuando hablamos de revegetar marihuana nos referimos al proceso en el que una planta que ha entrado en floración, o su ciclo de vida está llegando a su final, vuelve a la fase de crecimiento vegetativo de nuevo. Para que esto ocurra se han de dar unos cambios en el fotoperíodo, es decir, en la cantidad de horas de luz y oscuridad que reciba.

Como sabes, las plantas de marihuana fotodependientes desencadenan la floración cuando las horas de oscuridad son igual o superiores a 12 horas. En esta fase, las plantas se enfocan en la producción de cogollos hasta que cumplen su ciclo completo y acaban por morir, ya que son plantas anuales, a excepción de las autoflorecientes que no dependen del fotoperíodo y resultan inviables para la revegetación, puesto que su ciclo de vida está marcado desde su nacimiento y este no supera los 2 o 3 meses de vida.

Sin embargo, en las plantas fotodependientes, si el ciclo lumínico se modifica aumentando las horas de luz, la planta detiene su estado para retomar el ciclo de crecimiento inicial, revirtiéndose a su fase vegetativa de nuevo. En ese momento, dejará de formar flores para producir hojas y ramas nuevamente.

No confundamos la revegetación o regeneración con la replantación, puesto que en este caso, se estarían germinando nuevas semillas para iniciar un nuevo cultivo. Tampoco con la clonación, donde se crean nuevas plantas a partir de una.

Sí es cierto que a una planta de marihuana que ha sido revegetada, una vez que ha revertido a su fase vegetativa, se le pueden extraer esquejes.

Este proceso de revegetación se puede dar en las plantas de marihuana sin haberlo buscado. Hay veces que, en cultivos de interior, se ha quedado una luz encendida durante más tiempo del debido, afectando al período de oscuridad de 12 horas y ello ha desencadenado el corte de la floración, con la consiguiente revegetación.

Algo similar puede ocurrir en exterior con plantas que se plantaron fuera de época, (en invierno) o aquellas que son más sensibles a los cambios lumínicos, como algunas variedades F1 Fast Version® donde unos días nublados pueden haber desencadenado una floración anticipada en su período vegetativo, que vuelven a su estado vegetativo de nuevo cuando reciben las suficientes horas de luz, provocando la revegetación.

Si esto te pasa, puedes eliminar las flores que se estén formando y dejar que vuelva a su estado natural.

Planta revegetada, lista para florecer.
Planta revegetada, lista para florecer.

Beneficios de revegetar marihuana

Aunque ya te irás imaginando las enormes posibilidades y beneficios de revegetar marihuana, hacemos hincapié en los siguientes:

Ahorro de tiempo y recursos

No hace falta invertir tiempo ni dinero en seleccionar las semillas ideales para el siguiente cultivo. Al revegetar las que más te hayan gustado del cultivo actual, tendrías plantas para hacerlo. Se ahorra tiempo en el crecimiento de la planta, ya que las raíces permanecen intactas y listas para empezar a distribuir savia, conservando también su tallo central y las ramas que dejes sin cortar.

Además, no es necesario comprar más sustrato, con hacer una limpieza de sales al que ya tiene la planta, más un acondicionamiento con enmiendas y fertilizantes, sería más que suficiente para lanzar un nuevo cultivo.

Tampoco necesitas de otra sala para mantener a las madres en el caso de que hagas cosecha perpetua. O de una sala donde tengas esquejes que has extraído antes de pasarlas a florecer. Esto es porque muchas veces, los cultivadores son precavidos y guardan un par de clones de las plantas que están por florecer, por si apareciera el “santo grial” que todo cannabicultor busca, esa planta que podría convertirse en el próximo clon élite.

Producción continua

Podría darse el caso de que no tengas espacio para madres y clones, pero quieras seguir cultivando las plantas que acabas de cosechar. En este caso, revegetar la marihuana es la solución.

Además, si dispones de una sala para madres y clones, los auto-cultivadores hacen crecer las plantas de marihuana revegetadas hasta que pueden disponer de esquejes de estas plantas. Una vez se inicia el proceso, se puede cultivar continuamente sin parar. En una sala florecen, mientras que en esta otra van haciendo el vegetativo.

Conservación de genéticas valiosas

Imagina que, al ir a cosechar tus plantas, encuentras alguna que te ha llamado mucho la atención, pero no sacaste esquejes antes de ponerla a florecer. Con esta técnica lo tienes fácil, ya que siempre puedes usarla para revivir una planta que, en teoría, estaría muerta tras la cosecha.

Si te das cuenta, hay muchos beneficios de revegetar marihuana. Veamos ahora cómo llevar a cabo el proceso y lograr un 100% de éxito.

Pasos para revegetar marihuana

Bueno, ahora viene la parte que más interesa y que estabas buscando: cómo se hace la revegetación de la marihuana paso a paso.

Selección de la planta adecuada

Si bien se puede llevar a cabo con todas las plantas, no todas responderán igual. Por regla general, lo ideal es elegir plantas que estén lo más sanas posibles, que aún tengan suficiente follaje y clorofila. Una planta que no tiene apenas nutrientes y está totalmente amarilla puede resultar en un fracaso.

Las plantas del tipo sativo suelen ser algo más sencillas al disponer de una mayor masa vegetal y una mayor ramificación.

Características a considerar

Como decíamos, busca plantas que aún tengan algo de vigor y trata de ver el estado de las raíces, ya que es importante que se encuentren en buen estado. Si el sistema radicular está perjudicado, será más difícil llevar a cabo la revegetación. Busca raíces blancas o color crema.

Preparación del entorno

Conviene limpiar el lugar donde se realizará, evitando espacios con demasiada humedad ambiental. Hasta que no haya nuevo follaje, un exceso de humedad puede ser fatal para la planta. Vas a necesitar la luz que uses para crecimiento y algo de sustrato nuevo. Esto último no es indispensable, pero ayudará en el desarrollo de las nuevas raíces.

Luz, temperatura y humedad

Una vez que se inicie el proceso, la planta debe permanecer bajo un ciclo de 18H a 24H con la luz encendida, a ser posible luz con un espectro azulado, específica para vegetativo. Luz más amarilla o exclusiva para floración ralentizará el proceso.

La temperatura ideal estaría dentro del rango de unos 18 °C como mínimo en su período nocturno y entre 22 ºC y 25 °C para el diurno.

La humedad inicial no debería superar el 60% hasta que no se observe un nuevo crecimiento de hojas. En ese momento podría llegar incluso hasta el 80%.

El área debe estar bien ventilada, apoyándose en ventiladores para mover el aire.

Corte y poda

Aquí viene lo más importante: cosecha las partes de la planta importantes y corta el tallo principal, pero deja la parte baja sin cortar. Puedes dejar desde 2 a 4 ramas sin cortar. En las ramas que dejes, cosecha parte de las flores y deja algunos cogollos, preferiblemente los que tengan más hojas vivas y verdes.

Haz los cortes limpios, a ras del nudo más cercano y con herramienta esterilizada. Si dispones de cicatrizante, pónselo en los cortes. Una receta sencilla es usar plastilina o cinta adhesiva, por ejemplo.

Una vez hechas las podas, saca la planta de la maceta y haz una poda de raíces. Al hacer esto, aparte de disminuir el tamaño del cepellón para luego rellenar con sustrato nuevo, se fomenta el crecimiento de las raíces adventicias (esas que parecen pelillos y salen ramificadas), que son de menor tamaño y por la que le llega el alimento y el agua a la planta.

Las raíces más grandes sirven para sostener la planta, así que, en este caso en que se ha reducido su tamaño considerablemente, no resultan tan necesarias.

Proceso de revegetación

Tras unos días, empezarán a brotar nuevas ramas y hojas de los antiguos cogollos que hayamos dejado. Verás que de los cálices vuelven a brotar nuevas hojas, que pueden ir desde un pecíolo, a 3 o 5. El proceso para llegar a una fase vegetativa en que aparezcan nuevas hojas de tres o cinco foliolos puede llevar hasta un mes, o incluso más tiempo en algunas variedades.

Una vez tienen suficientes nuevos brotes y hay nuevas hojas, se pueden ir eliminando los viejos cogollos con mucho cuidado de no cortar los nuevos crecimientos. En estos cogollos se pueden formar botrytis y no nos interesa.

Nutrientes y cuidados específicos

No nos podemos olvidar de aportar nuevos nutrientes, bien en el nuevo sustrato o en el viejo, hay que procurar a las plantas suficiente alimento de crecimiento, acompañado de vitamina B1 o estimulantes de raíz. Tampoco sobrecargues, un exceso puede ser perjudicial.

Red Mandarine F1 Fast Version® lista para revegetar.
Red Mandarine F1 Fast Version® lista para revegetar.

Cuidados durante la revegetación

Es crucial estar pendiente en todo momento del proceso de la revegetación de la marihuana. Monitorea las plantas en busca de plagas y enfermedades para poder solucionarlas cuanto antes.

Ve ajustando la nutrición y según vaya creciendo, aumenta la dosis.

Ten en cuenta que llevar a cabo esta técnica le supone un enorme estrés a la planta, por lo que debes cuidar muy bien todos los detalles.

Problemas comunes y soluciones

Estrés por cambio de fotoperíodo

La planta puede verse estresada por el cambio de ciclo.

Solución: ajusta el cambio de horario paulatinamente, sumando una hora cada día hasta llegar a las 18H.

Plagas y enfermedades

Las plantas revegetadas pueden ser más susceptibles a plagas y enfermedades debido al estrés del cambio de ciclo.

Solución: mantén un ambiente limpio y monitorea regularmente la planta para detectar signos de plagas o enfermedades. Usa tratamientos orgánicos como aceite de neem o jabón insecticida para controlar las infestaciones.

Deficiencias nutricionales

La planta puede mostrar signos de deficiencias nutricionales al cambiar de fase, como hojas amarillas o crecimiento lento.

Solución: ajusta el régimen de fertilización para proporcionar los nutrientes necesarios para el crecimiento vegetativo. Un fertilizante balanceado con un mayor contenido de nitrógeno puede ser beneficioso.

Problemas de iluminación

La iluminación inadecuada puede afectar negativamente el proceso de revegetación.

Solución: asegúrate de que la planta reciba suficiente luz de alta calidad. Las luces LED de espectro completo son una buena opción para el crecimiento vegetativo. Mantén las luces a una distancia adecuada para evitar quemaduras.

Problemas de riego

El riego inadecuado puede causar estrés hídrico, afectando el crecimiento de la planta, pero un exceso puede ser mortal, ya que al inicio del proceso tiene poca demanda.

Solución: Ajusta el riego según las necesidades de la planta en la fase vegetativa. Evita el riego excesivo y asegúrate de que el sustrato drene bien para prevenir la pudrición de las raíces.

Conclusión

Bueno, no queremos acabar el reportaje sin dejaros el mejor consejo que podemos dar: paciencia. Como en toda fase del cultivo de cannabis, ser paciente, a la par que cuidadoso, nos asegura el éxito.

Disfruta cada etapa del mismo, sobre todo al llevar a cabo este tipo de técnicas en las que estamos jugando a ser dioses, o doctores Frankenstein como en esta, donde recuperamos una planta que, por ley, estaría muerta.

No te olvides de visitar nuestro catálogo para comprar semillas de marihuana, en busca de tu nueva “paciente”.

Gracias por la lectura.

¡Dulces cosechas!


Sweet Seeds S.L. no se hace responsable del mal uso de la información contenida en este artículo. El cultivo de Cánnabis puede ser constitutivo de delito o de sanción administrativa; consulte la legislación sobre Cánnabis en su lugar de residencia. Sweet Seeds S.L. no pretende en ningún caso incitar a prácticas no legales.

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