Principales destinos de turismo cannábico
Viajar, posiblemente sea una de las experiencias más reconfortantes en la vida para quienes lo practican. Al viajar, el cuerpo segrega serotonina naturalmente e implica salir de tu zona de confort y te permite descubrir lugares, personas y modos de vida que jamás podrías imaginarte, enriqueciendo tu psique. Ya dijo el filósofo chino Lao Tzu “Un buen viajero no tiene planes fijos ni intención de llegar” alentándonos a disfrutar del camino, tanto o más que del destino.
El turismo cannábico es un fenómeno mundial que mueve miles de personas, buscando su destino perfecto: experiencias estimulantes, sabores exóticos y relax para la mente y el cuerpo. Y todo ello con la mayor seguridad. Dejó de ser clandestino, con viajes exprés a Amsterdam o Chefchaouen, para convertirse en un producto de consumo donde se ofrecen rutas, festivales, tours por granjas de cultivo o incluso masajes y spas con infusiones de marihuana.
En este artículo te llevamos por los destinos turísticos de marihuana más populares del planeta en la actualidad, repasamos cómo empezó esta tendencia y te damos claves para disfrutar estos viajes con conocimiento y responsabilidad. ¿Tienes la mochila lista?
¿Qué es el turismo cannábico?
El turismo cannábico es, a grosso modo, viajar a un lugar donde el consumo, la compra o la participación en actividades relacionadas con la marihuana es totalmente legal y socialmente aceptado. No hablamos de un lugar donde poder comprar hierba sin miedo, hablamos de una industria turística en expansión que genera miles de millones, con regulaciones claras, negocios especializados y experiencias diseñadas para el consumidor cannábico.
Los orígenes del turismo cannábico suelen darse en muchos blogs especializados como inicio en los coffee shops de Ámsterdam (Mellow Yellow fue el primero, en 1972) pero tengo que discrepar al respecto. Ya en los años 60, muchos hippies viajaban a Marruecos, la India y en menor medida a la zona de la cordillera del Kush, entre Pakistan y Afganistan, en busca de una vida más sosegada y espiritual, disfrutando de la libertad que hay en esos países para consumir cannabis.
Incluso antes, el profesor Albert Arnavat nos muestra en su libro “Kif y orientalismo: el cannabis y los viajeros y artistas españoles en Marruecos, 1803-1912” muchos testimonios de viajeros de toda índole que frecuentaban el país para degustar el cannabis.
A día de hoy, la idea está muy extendida y encontramos diversos destinos, cada uno con sus peculiaridades y ofertas, a lo largo y ancho del planeta: América, Asia y Europa son quienes se llevan el grueso.
La clave del turismo de la marihuana es que el destino cuente con normativas transparentes o costumbres asentadas, desde cómo se compra hasta dónde se puede consumir. Y eso es precisamente lo que ha convertido esta tendencia en algo seguro, sostenible y accesible.
El auge del turismo de marihuana en el mundo
En los últimos años hemos visto un crecimiento desbordante del turismo cannábico y en parte viene dado por dos motivos: la legalización/regulación del cannabis con fines recreativos o medicinales en múltiples lugares y el fin del Covid. Solamente en el año 2022, el turismo de la marihuana movió US $17.000 millones y se espera que llegue a los cerca de 23.000 millones en el año 2030.
Los primeros en ver el potencial del viajero marihuanero fueron países como Canadá o estados como Colorado o California, en USA, que no solo abrieron dispensarios si no que crearon toda una industria turística a su alrededor, con resorts exclusivos centrados en ofrecer una experiencia 360º al usuario.
Le siguieron destinos como Tailandia, con su exotismo, España (con sus vacíos legales) y algunas partes en Sudamérica o el Caribe donde se funden programas de sostenibilidad, coliving, formación cannábica y múltiples talleres, todo siempre relacionado con el cannabis. Alemania, tras su regulación, se postula como un serio candidato pero aún falta un tejido que lo sostente.
Los mejores destinos para el turismo cannábico
Hoy, es posible encontrar desde alojamientos “cannabis-friendly” (similares a un Airbnb para este público) y alojamientos de lujo, hasta agencias que organizan tours especializados, retiros wellness e incluso clases de cocina o arte con cannabis.
Un dato que llama la atención: aproximadamente la mitad de los millennials considera el acceso al cannabis al planificar sus vacaciones. Yo iría más allá y diría que más de la mitad de los consumidores de cannabis, eligen sus destinos vacacionales dependiendo de la permisividad vigente en cada lugar.
Ahora, te invitamos a conocer los más famosos (si es que no los conoces ya).
Amsterdam, Países Bajos: El pionero del turismo cannábico
Al pensar en Amsterdam, lo primero que se nos viene a la cabeza es el olor a marihuana y la enorme variedad de locales y cepas de cannabis o extracciones por probar. Es, sin duda, el lugar que más fama ha cosechado desde sus inicios en la industria del turismo cannábico. Sus famosos “coffeeshops” operan bajo una política de tolerancia que, aunque técnicamente no legaliza la venta, la permite en locales autorizados
Visitar algunos de sus coffeeshops, pasear por Vondelpark o recorrer sus canales es algo que grabarás en la memoria para siempre (sí, aunque digan que los marihuaneros perdemos memoria). Si estás acostumbrad@ a consumir con paranoia policial, la libertad que ofrecen los coffees y el ambiente multicultural que se respira en la ciudad es, cuanto menos, reconfortante.
Como anécdota, hace años cuando la marihuana no estaba tan extendida en España, era el sitio al que ibas y el souvenir que no podía faltar eran unas semillas y una bolsita con marihuana para disfrutar con tus colegas. Y era excelente. Hoy en día, quizás el producto no supere las expectativas o te parezca algo caro, pero en líneas generales, visitar una ciudad con tanto encanto como Amsterdam siempre tendrá su aquél y seguirá siendo una meca cannábica que todo viajero marihuanero debería conocer.
No te puedes perder:
- Coffeeshops como Boerejongens (donde podrás degustar una buena Green Poison® (SWS14), Dampkring o Hill Street Blues.
- Museos dedicados al cannabis como el museo Hash Marihuana & Hemp Museum
- Variedades locales y una gran oferta en zumos, infusiones y munchies.
- Sus parques y calles.
Colorado, Estados Unidos: Un modelo de legalización en América
Colorado significa lujo y sofisticación para el turismo cannábico. En 2012 fue el primer estado de Estados Unidos en legalizar con total libertad el cannabis para uso recreativo y en el año 2014 empezó la distribución en dispensarios a lo largo y ancho del estado. Solamente en su capital, Denver, ya hay más del doble de dispensarios (unos 270) que Starbucks y McDonalds, por lo que vamos por buen camino. En estos 10 años, se han ingresado cerca de 17 billones de dólares, únicamente de la venta de marihuana y sus derivados
Junto a Canadá, o estados como Missouri, son los destinos cannábicos más Top del panorama actual. ¿Qué lo hace tan especial? Veamos.
- Existe una extensa oferta de dispensarios muy cuidados, que ofrecen productos de muy alta calidad, perfectamente atendidos y en un ambiente muy seguro.
- Complementado con tours educativos sobre cultivo a plantaciones, extracciones, gastronomía cannábica y un largo etcétera relacionado con la marihuana.
- Por si fuera poco, algo que distinguió a Colorado del turismo cannábico clásico fue la apertura de la experiencia, más allá del consumo de marihuana: alojamientos de alta calidad con lujosos spas, catas y cocina gourmet, junto a sesiones de exploración y crecimiento personal, bienestar y hospitalidad.
- Por último, y no menos importante: la naturaleza. En el estado de Colorado se encuentran algunas de las mejores estaciones de ski del mundo, en las nada desdeñables Montañas Rocosas.
Es el paradigma de un mercado regulado, donde la calidad, la seguridad y el impacto económico positivo son evidentes. De ahí su éxito.
Tailandia: Un pionero asiático en la regulación del cannabis
Tailandia ya es un destino muy recurrente para los viajeros más habituales, pero tras convertirse en el primer país Asiático en legalizar el cannabis, el turismo cannábico trajo una creciente cantidad de consumidores de marihuana que buscan espacios donde sentirse tranquilos mientras se fuman un porro, a la par que se relajan con un masaje o disfrutando de un atardecer en alguna de sus paradisíacas playas.
Actualmente, el gobierno de Tailandia está valorando medidas para volver a penalizar el cannabis, y en junio del 2025 restringe el acceso libre. Aparentemente, solo es posible comprar con receta médica y se obliga a los comercios a disponer de profesionales y a ofrecer un producto con mayor trazabilidad. Puede que esto ayude a percibir una mayor seguridad en el consumidor, basándose en criterios más estandarizados por el personal sanitario, pero alejaría al consumidor recreativo. Todo está por ver.
Mientras tanto, disfrutar de unas vacaciones cannábicas en Tailandia está al alcance de todo aquél que pueda pagar un pasaje en avión, puesto que es un lugar económico, sobre todo si se compara con Colorado o Canadá, por ejemplo.
Lo más destacable:
- Coffeshops de estética muy tropical y exótica.
- Variedades de marihuana de la zona, junto a genéticas modernas.
- Precios muy económicos.
- La oferta cultural (y gastronómica), con sus templos y poblaciones, junto a su naturaleza y lo cercano de sus habitantes, serían más que suficientes para lanzarte a viajar a Tailandia.
Pese a estos reajustes legales recientes, Tailandia sigue siendo uno de los destinos más atractivos para el turismo cannábico en Asia.
Barcelona, España: El destino cannábico de Europa
España es un caso aparte. La aparición de los cannabis social clubs CSC a principios del siglo XXI, aprovechando el vacío legal que permite consumir cannabis en espacios privados, abrió la puerta a que los consumidores de marihuana pudieran reunirse en clubes que funcionan como asociaciones privadas, situándose como un importante destino turístico de marihuana. El modelo contempla la posibilidad de entrar a ser socio pagando una cuota, siendo mayor de edad, y ello te da derecho a comprar y consumir marihuana y sus derivados en el propio local.
Barcelona fue la ciudad pionera y donde hay una mayor concentración. Suele ser un destino para el turismo cannábico por la increíble oferta de locales, la calidad de los productos, el diseño y la seguridad. Además, se complementa con eventos y festivales como Spannabis (aunque este año deja de celebrarse) y lo cosmopolita de la ciudad, incluyendo el clima mediterráneo y su gastronomía Top.
En la actualidad, es la ciudad que lidera el mercado en Europa.
¿Qué esperar al viajar como turista cannábico?
Antes de lanzarte a hacer turismo cannábico, ten en cuenta lo siguiente:
- Sé responsable y disfruta, recuerda que menos es más.
- Respeta e infórmate de las leyes locales, del proceso de compra y consumo.
- Consume con precaución hasta conocer la potencia de las distintas hierbas o edibles, ya que pueden arruinarte la experiencia.
- Olvídate de cruzar la aduana con marihuana.
- Intégrate y conoce a la gente local, siempre es gratificante.
Experiencias únicas para los turistas de marihuana
Un viaje cannábico no es solo ir a fumar marihuana así que expande la experiencia con la oferta de cada zona.
Visitas a plantaciones de cannabis
Muchos viajeros aprovechan para ver, por primera vez, cómo se cultiva su planta favorita:
- Tours por invernaderos y cultivos indoor.
- Clases de extracción y elaboración de hachís.
- Catas de variedades (como si fueran vinos).
- Talleres sobre botánica del cannabis.
Festivales y eventos cannábicos
El turismo de marihuana también mueve fiestas y ferias, además de eventos más pequeños:
- Cannabis Cup de Ámsterdam
- 4/20 en Denver
- Festivales culturales en Tailandia
- Spannabis y copas cannábicas en Barcelona
Los beneficios del turismo cannábico para las economías locales
El turismo cannábico genera empleos directos e indirectos. Ha hecho crecer la economía en muchos destinos y es muy distinto al que mueven las típicas vacaciones de “discotecas y borrachera”, con un turista muy respetuoso con el lugar, sus gentes y con el entorno.
Muchos negocios locales disfrutan la visita de este tipo de turista que valora mucho más el producto artesano y local. Además, han visto cómo ha disminuido el mercado ilegal y la inseguridad que ello provoca.
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Y recuerda, “… caminante, no hay camino, se hace camino al cultivar”
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