¿Cómo se hace el compost casero?

Muchas veces te habrás preguntado cómo se hace el compost casero y cómo aplicarlo en tus cultivos de marihuana. Bueno, pues en poco menos de 20 minutos, te vamos a enseñar a preparar un compost casero para marihuana con el que vas a lograr unos resultados de primer nivel.

Y es que en Sweet Seeds® siempre abogamos por un uso consciente de los recursos y por la necesidad de reducir el uso de fertilizantes químicos en los cultivos, lo cual es un pilar que sustenta la base de la sostenibilidad.

El compost casero es un abono orgánico que se logra tras la descomposición controlada de materiales orgánicos, como restos de comida y los desechos del jardín, así pueden ser hojas y tallos de tus plantas. Este proceso natural de reciclaje es llevado a cabo por microorganismos y pequeños invertebrados, que transforman los residuos en una sustancia rica en nutrientes y los hace disponibles para las plantas.

En resumen, el compost es esencial para una agricultura sostenible que busca no solo la productividad, sino también el cuidado y regeneración del medio ambiente, además de proveernos de unas flores de máxima calidad, con un ahorro considerable.

Beneficios del compost para el cultivo de marihuana

La importancia del compost radica en su capacidad para mejorar la estructura del suelo, aumentando su porosidad y capacidad de retención de agua. Esto es vital para la salud de las plantas, ya que un suelo bien estructurado facilita el acceso a agua y nutrientes de manera más eficiente.

Además, el compost aporta una diversidad de microorganismos beneficiosos que ayudan a suprimir enfermedades del suelo.

Al integrarse perfectamente en el sustrato, el compost casero actúa como una esponja, reteniendo agua y alimento, los cuales se liberan lentamente, ofreciendo una disponibilidad total para las plantas, justo cuando lo necesitan. Imaginemos que sería algo así como una nevera que se rellena sola y de la cual podemos coger alimentos cuando los necesitemos. Alimentos en general, ¡no solo pienses en el postre!

En el cultivo de marihuana, el uso de compost casero reduce el uso de fertilizantes químicos y ayuda a crear una mayor protección en la planta frente a excesos de nutrientes, plagas y enfermedades, logrando un producto final de máxima calidad.

Además, con esta práctica, se contribuye a la conservación de ecosistemas, aparte de crear un sistema de reciclaje.

Sin duda alguna, el uso de compost para marihuana es un acierto que hará tu cultivo más sencillo, resistente y productivo.

Elementos esenciales para un compostaje exitoso

Bueno, pongámonos manos a la obra y veamos qué elementos necesitamos para preparar el mejor compost casero para marihuana.

Como norma general, preparar compost casero es sencillo y necesitarás de pocos elementos. Los principales son materiales verdes (restos de frutas, verduras, resto de poda, bolsas de té o posos de café), que serán los que aporten nitrógeno; materiales marrones (hojas y ramas secas trituradas, papel, cartón), más ricos en carbono, y un recipiente donde realizar el compostaje.

En el siguiente apartado vamos a detallar todo el proceso y os vamos a dar unos buenos trucos para que tus plantas dispongan del mejor compost casero.

Paso a paso: Creando tu pila de compost casero

Ahora que ya vas teniendo claro que no te hace falta comprar mucha cosa, entraremos en la parte práctica de cómo se hace el compost casero.

¡Toma nota y vamos al lío!

Elección del sitio ideal para tu compost casero

Lo primero será elegir el lugar donde vamos a realizar el compost. De esto va a depender en gran medida el éxito del proceso.

• Por un lado, es recomendable elegir un lugar cercano al jardín o zona de cultivo y, a ser posible, de la cocina. Acuérdate de que tendrás que echar los restos de poda, de comida y algo de agua. Así tendrás todo a mano.

• Elige un sitio lo más plano posible para colocar tu compostadora y asegúrate de que tenga un buen desagüe porque al crear el compost también se genera un drenaje de líquidos. Puedes ponerlo sobre una base que lo separe del suelo y así facilitar la recogida.

• Ubícalo en una zona donde reciba sol parcial y esté protegido del viento. Si recibe demasiado calor, se secará en exceso y si no logra una temperatura suficiente, puede que se ralentice el proceso por estar demasiado frío. Lo ideal es que el interior se mantenga entre 55 ºC y  65 ºC, para acelerar el proceso y acabar con patógenos y semillas que hayan entrado en la pila.

Ten en cuenta que se pueden generar olores, así que evita colocarlo cerca de ventanas o zonas comunes que compartas con vecinos.

Materiales necesarios para comenzar

Lo más importante será el compostador o contenedor de compost donde vas a crear tu compost casero para marihuana. Lo puedes construir tú mismo, o lo puedes comprar ya hecho.

Hay varias medidas y, elegir cuál, dependerá de tus necesidades y del espacio disponible. También los hay rotatorios, que ayudan mucho en el proceso de voltear la pila.

Luego necesitarás el material verde y marrón con los que realizar la pila de compost. Os recordamos que lo vais a extraer de: desechos y recortes de frutas y verduras, posos de café o té, de hojas, ramas, papel y cartón.

También vas a necesitar algo para removerlo de vez en cuando, así que hazte con una pala o tenedor de compost, ya que te van a facilitar mucho la tarea.

Por último, puedes hacerte con un termómetro de compost para monitorear la temperatura interior y asegurarte de que esté en el rango óptimo.

Construyendo la base de tu pila de compost

Ya tenemos lista de ingredientes y los materiales. Ahora vamos a colocarlos de la manera más eficiente posible:

• Prepara la base con ramas o paja para ayudar a airear desde el fondo y a permitir un mejor drenaje, ya que no es bueno que esté encharcado.
• Pon encima los materiales marrones (hojas secas, ramas secas trituradas y papel o cartón) que serán quienes aporten el carbono necesario.
• Le toca el turno a los materiales verdes.

Una vez lo tengas, cúbrelo con un plástico o con su tapa, para protegerlo de la lluvia y que conserve una buena temperatura y humedad.

Añadiendo capas de materiales verdes y marrones

Tras esta primera pila puedes ir añadiendo más material, según vayas teniendo más cantidad, pero hazlo siempre en el orden que corresponde. Alterna una capa de material verde con otra marrón.

Siguiendo este orden se obtiene un mejor resultado y un material más uniforme en la creación de compost casero rápido.

Manteniendo la humedad y aireación adecuadas

No dejes de prestar atención a la pila y vigila que mantenga siempre una humedad constante. Se debe ver como una esponja escurrida, pero no encharcada. Si lo notas muy seco, puedes añadir un poco de agua. Si, por el contrario, estuviera demasiado empapado, prueba a dejar la tapa levantada hasta que se regule y remueve la pila para mezclar la parte más húmeda, con la parte más seca.

También debes estar atento a su aireación, por ello tendrás que ir removiendo la pila de vez en cuando, pero esto te lo explicamos en el siguiente apartado.

Cómo y cuándo remover la pila de compost

El principal motivo por el que debes remover la pila de vez en cuando es para suministrar un aporte de oxígeno a la mezcla, el cual resulta ideal para la descomposición aeróbica de los materiales.

Además, se irá formando un compost más homogéneo y se repartirá mejor la humedad. Para ello, usa la pala y asegúrate de que los materiales más secos de los bordes se mezclen con los más húmedos.

Lo ideal es hacerlo al menos cada 2 o 4 semanas. También te recomendamos que voltees la mezcla cuando la temperatura en el centro de la pila descienda de su rango óptimo (55 °C a 65 °C). Así aseguras una actividad microbiana saludable.

Si notas mal olor, es indicativo de falta de oxígeno por lo que debes remover.

Monitoreando el progreso de tu compost

Lograr un compost casero de calidad, rico en nutrientes, es sencillo mientras estés pendiente de su progreso y de que la descomposición se haga correctamente. Por ello sigue estas recomendaciones básicas:

• Según avance el proceso, el compost irá adquiriendo un tono marrón oscuro y la textura será uniforme. Además, disminuirá su volumen inicial.
• Debe tener un olor como el de la tierra fresca. Si huele mal, es señal de falta de oxígeno.
• El compost debe sentirse caliente, rondando los 65 °C. También debería notarse húmedo al tacto, no empapado.

Cómo saber cuándo el compost está listo

Resulta sencillo saber cuándo está listo para su uso en tus plantas de marihuana. Su aspecto es de una textura fina, con cierta esponjosidad, con un color marrón oscuro parecido a la tierra del bosque. No deberías apreciar el material inicial y debe verse descompuesto por completo.

Aquí recalcamos que el olor debe ser fresco, como a tierra húmeda.

Llegados a este punto, nuestro compost casero está listo para su uso o almacenaje.

¿Cómo hacer compost casero en espacios pequeños?

Para aquellos que quieran saber cómo hacer compost casero en espacios pequeños, hay algunas opciones viables.

La más sencilla es hacerlo en botes de plástico: haz agujeros en la base y en las paredes. Trocea bien los materiales y colócalo, tapado, en un lugar donde no moleste. No te olvides de remover y revisar de vez en cuando.

La otra opción es ayudarte con lombrices. Para ello usa una caja o contenedor con tapa, hazle unos agujeros y ponle tapa. Añade los restos de comida, vermiculita y pon lombrices (preferiblemente rojas californianas). Es un proceso más lento, pero igual de efectivo.

Uso del compost en tu cultivo de marihuana

Una vez que tengas listo tu compost casero, has de saber cómo y cuándo aplicarlo en el cultivo de marihuana.

En primera instancia, el compost casero debe mezclarse con el sustrato o tierra que uses. Para el uso en macetas lo ideal es mezclar una cantidad con el sustrato que vayas a usar antes de rellenar la maceta. Puedes poner un 20% de este compost respecto al sustrato. Si ves que no es suficiente y se observan carencias, es mejor añadirlo después.

Si lo aplicas al suelo directo, con una ligera capa de 2 a 5 cm, es suficiente. Remuévelo luego para que se mezcle al menos con los primeros 25 cm de tierra.

Otra opción muy usada, por su mejor dosificación, es el “té de compost”. Prepara tu propio té de compost con esta sencilla receta:

• Mezcla 1/4 de agua reposada con un tercio de compost casero.
• Déjalo macerar por 3 o 4 días, removiendo de vez en cuando.
• Para favorecer la proliferación de microorganismos aeróbicos, se recomienda airear la mezcla con una bomba de acuario.
• Pasado el tiempo, cuela la mezcla.
• Para el riego, usa la mezcla en una proporción de 3 partes de agua con una de té. Si es para abono foliar, 4 a 1.

Otro de sus posibles usos sería como cubierta superior (topdressing), usado directamente en la superficie, sin remover. Además de aportar nutrientes lentamente, lograrás eliminar malezas que puedan competir con tu planta y se retendrá una mayor humedad.

Ten en cuenta que si es para un cultivo de exterior, lo ideal sería aplicarlo al inicio del cultivo. También puedes añadirlo una vez has cosechado, para enriquecer el suelo del siguiente cultivo.

Este compost casero es válido para el uso en plantas autoflorecientes y fotodependientes.

Problemas comunes y soluciones en el compost casero

Los problemas más comunes que se pueden presentar son:

• Malos olores o plagas: es importante que no uses alimentos cárnicos, pescado, aceites o lácteos, ya que pueden atraer plagas, además de dar muy mal olor. Si el problema no está causado por esto, puede estar causado por un exceso de material verde (en este caso aumenta los materiales marrones) o por falta de oxígeno o exceso de humedad. En este caso remueve la pila más a menudo y ajusta la humedad.
• Compost no uniforme: causado por falta de mezcla, o trozos de material demasiado grandes. La solución sería trocearlos en un menor tamaño, para ayudar en la descomposición.
• Descomposición lenta: la causa es porfalta de aireación, temperatura más baja de lo recomendado o falta de nitrógeno. Para solucionarlo, voltea la pila con más asiduidad, aumenta la temperatura exponiendo la compostera más tiempo al sol, o cúbrelo con alguna tapa o plástico.
• Exceso de humedad: causado por lluvias o riego excesivo. Para solucionarlo, resguárdalo de la lluvia y añade más hojas secas o aserrín.

Conclusiones y mejores prácticas para un compost saludable

Bueno, ya tienes todas las claves sobre cómo hacer un compost casero de mucha calidad, totalmente ecológico y sostenible, con el que vas a mejorar tu cultivo, siempre y cuando tengas acceso a buenas genéticas con las que poner a prueba tu compost casero para marihuana.

Visita nuestro catálogo y elige la que más se adapte a tus gustos. En Sweet Seeds® estamos convencidos de que nuestras cepas adquieren su mejor calidad y expresión con abonos bio, y si están preparados por uno mismo, el valor se duplica.

¡¡Gracias por la lectura y a compostar se ha dicho!!

Sweet Seeds S.L. no se hace responsable del mal uso de la información contenida en este artículo. El cultivo de Cánnabis puede ser constitutivo de delito o de sanción administrativa; consulte la legislación sobre Cánnabis en su lugar de residencia. Sweet Seeds S.L. no pretende en ningún caso incitar a prácticas no legales.